Desbloqueando el Poder de la Intuición en la Era del Conocimiento

En la actualidad, vivimos inmersos en una sociedad que valora el conocimiento, la información y la lógica respaldada por datos verificables. Esta mentalidad ha llevado a generaciones a anular gradualmente su capacidad intuitiva, relegándola a un segundo plano. La tendencia es clara: si no está escrito ni respaldado por pruebas concretas, simplemente no existe. Este enfoque ha llevado a considerar a la intuición como algo irracional, un fenómeno que, una vez desestimado, desaparece por completo.

En nuestra búsqueda de excelencia intelectual, hemos convertido la mente humana en una máquina, eliminando aspectos fundamentales de nuestra humanidad. Sin embargo, a medida que las máquinas superan en eficiencia en tareas lógicas y procesamiento de información, surge la necesidad de valorar las habilidades blandas en el ámbito empresarial. La creatividad, considerada una "hija" de la intuición, se revela como una competencia crucial. Un estudio de Adobe y LinkedIn respalda esta afirmación, revelando que las habilidades creativas han impulsado incrementos salariales significativos en comparación con quienes carecen de ellas en diversos sectores laborales (La Nación, 2021).

La intuición, a diferencia de la razón, no se cuestiona a sí misma. Surge, susurra un mensaje y se desvanece. La clave radica en prestarle atención y comprenderla adecuadamente. Aquí, la inteligencia (diferente de la capacidad intelectual) entra en juego: es la habilidad de conectar los puntos en el presente, observar con perspectiva y actuar de manera coherente.

¿Por qué la intuición suele acertar? Una explicación científica apunta a que el sistema nervioso, expresado a través de las conexiones nerviosas del estómago, puede interpretar en tan solo 3 segundos más información que el sistema nervioso central (el cerebro). Esa primera sensación inexplicable en el cuerpo, por ende, suele ser la correcta. Todo lo que sigue es la razón cuestionando y tratando de entenderla, dudando de sí misma.

Consejo:

Escucha tu cuerpo y presta atención a esa primera sensación. En la era del conocimiento, desbloquear el potencial de la intuición se convierte en una habilidad valiosa que va más allá de la lógica y los datos verificables.